3/6/24

Voces femeninas en la investigación: 4 historias de investigadoras destacadas de Pulso PUCP

Autora: Adriana Velásquez

Si bien, actualmente, existe una mayor conciencia sobre la importancia de combatir las brechas y la violencia que afectan a las mujeres, aún persisten desafíos significativos en el camino hacia la equidad de género en el Perú. Ante este contexto, el abordaje de temas vinculados a las brechas, estereotipos y violencia de género en el ámbito académico y la representación femenina en estos espacios resultan esenciales.

En el marco del Día Internacional de la Mujer, desde el Instituto de Analítica Social e Inteligencia Estratégica Pulso PUCP, queremos reconocer y visibilizar el trabajo de las jóvenes investigadoras que han formado y siguen formando parte de la historia de Pulso PUCP. A través de sus contribuciones a las ciencias sociales, estas investigadoras han demostrado determinación, exigencia y rigurosidad en cada uno de los proyectos que han tenido a cargo dentro y fuera del instituto.

Gabriela Palacios: “He percibido dudas por tener el cargo que ocupo siendo mujer y joven. En ese sentido, para posicionarme en este espacio ha habido una autoexigencia y un constante compromiso con la excelencia”

Gabriela Palacios es licenciada en Antropología y actualmente se desempeña como coordinadora de la unidad cualitativa del área de Consultorías en Pulso PUCP. Ha participado y publicado diversas investigaciones relacionadas a temas de género, sexualidad, interculturalidad y educación, principalmente, en poblaciones rurales e indígenas. A sus 28 años de edad, su capacidad para abordar desafíos complejos y su compromiso con la excelencia la han convertido en una investigadora destacada, aportando perspectivas frescas y trabajando con rigurosidad para entregar productos de alta calidad.

Entre sus trabajos más significativos es la “Investigación sobre la situación de la salud sexual y salud reproductiva de mujeres, jóvenes y niñas indígenas en Perú”, realizado para el Centro de Culturas Indígenas del Perú - Chirapaq, donde se desempeñó como investigadora principal. Este estudio se llevó a cabo en 5 regiones del Perú (Puno, Ucayali, Ayacucho, Junín  y Loreto) con el fin de indagar sobre la situación de la salud sexual y reproductiva de mujeres indígenas.

Entre los hallazgos más relevantes de este estudio, Gabriela destaca que las mujeres indígenas tienen conocimientos limitados sobre derechos sexuales y reproductivos, obteniendo información principalmente de la escuela, la familia y establecimientos de salud, con un enfoque punitivo y restrictivo de la sexualidad. Asimismo, se evidenció que el personal de salud  ejerce violencia contra las mujeres indígenas durante el parto y el postparto, con acciones como el excesivo tacto para ver el grado de dilatación o colocación de métodos anticonceptivos sin consentimiento.

Gabriela ha trabajado con niños y niñas desde Estudios Generales Letras. En la foto se ve el trabajo que hizo en Educa Ancón. (Foto: Archivo personal)

Por otro lado, dentro del área de consultorías y proyectos de Pulso PUCP, Gabriela también ha demostrado su determinación y liderazgo, trabajando con otras unidades de la PUCP y con instituciones externas como la Autoridad de Transporte Urbano para Lima y Callao (ATU) y la Organización Internacional para las Migraciones de las Naciones Unidas (OIM). De manera que, su experiencia en el instituto le ha permitido adentrarse a temáticas particulares de cada proceso de investigación y desarrollar la capacidad para coordinar e interactuar con los diferentes tipos de clientes.

“Mi trabajo en Pulso implica mucha organización, una coordinación constante con el equipo y una adecuada distribución de las tareas para cumplir con los plazos establecidos. (...) Otro punto es el tema del clima laboral. Yo trabajo con dos asistentes entonces es importante generar espacios de diálogo con ellas para que sientan que sus opiniones son tomadas en cuenta y reconocidas”.

A pesar de sus logros, Gabriela ha enfrentado desafíos significativos en su papel como investigadora. “En varios momentos he sentido algunas miradas que al inicio son cuestionadoras pero que, después cuando se entrega el producto final, dicen “que bien lo has hecho”. Y claro, mi equipo y yo tenemos la capacidad para hacerlo bien.” En varios momentos de su carrera, ha experimentado cuestionamientos propios sobre su trabajo, lo cual Gabriela manifiesta a través de un seguimiento muy exhaustivo y la necesidad de demostrar constantemente que tanto ella como su equipo son capaces de realizar las actividades que se proponen con altos estándares de calidad.  “He percibido dudas por tener el cargo que ocupo siendo mujer y joven. En ese sentido, para posicionarme en este espacio ha habido una autoexigencia y un constante compromiso con la excelencia”, declara.

Lisette Gamboa: “Muchas mujeres tenemos internalizado este mandato de la sobreexigencia a la hora de hacer investigación y sobreproducir para reclamar este espacio”

Las experiencias personales de Lisette entorno a las brechas de género, relaciones de poder y la violencia de género fueron un punto de inflexión que la llevó a cuestionarse por qué ocurren este tipo de fenómenos. Desde muy joven, le llamaron la atención las injusticias que ella misma vivía y las que veía en otras personas con respecto a la desigualdad de género. Estos hechos la llevaron a estudiar Antropología y, posteriormente, una maestría en Estudios de género, ambas en la PUCP.

“Como antropóloga me llamaba la atención entender cómo se daban las relaciones de género en distintos espacios, y, en temas de mi interés como la salud sexual y reproductiva, la salud mental, la diversidad corporal y la maternidad también es indispensable tener un enfoque de género”, comenta.

En el transcurso de su desarrollo profesional, Lisette ha realizado y participado en distintos estudios y proyectos. En su investigación de tesis de licenciatura, abordó las relaciones con el cuerpo femenino entre mujeres diagnosticadas con trastornos alimenticios, así como las expectativas sociales que rodean este tema. Además, para su posgrado, decidió adentrarse en la investigación sobre la configuración de la discapacidad en madres con discapacidad visual. Y en 2022, tuvo la oportunidad de trabajar en la primera encuesta nacional de salud mental con el Instituto Nacional de Salud Mental Honorio Delgado. “Algo que pude aportar como especialista en estudios de género fue incluir la pregunta sobre la identidad de género dentro de la encuesta”, recuerda.

Ese mismo año, trabajó como consultora especializada en género para Pulso PUCP en la elaboración del estudio que brinda los insumos para el desarrollo del Plan para la Igualdad de Género y Diversidad 2023 al 2027 de la Oficina para la Igualdad de Género y Diversidad de la PUCP, y, a su vez, realizó el Informe de resultados de la encuesta "Familia y Roles de Género" basado en encuestas aplicadas a hombres y mujeres mayores de 18 años a nivel nacional. Sobre este último estudio, Lisette señala: “Un hallazgo muy importante es que mientras en el discurso de estas personas hay una mayor impresión de equidad, todavía se mantienen las brechas y estereotipos de género muy marcados con respecto a las tareas que se desenvuelven en la esfera doméstica”.

Lisette ha recibido diversos reconocimientos por su contribución en instituciones como el MIDIS, IFEA, Cátedra UNESCO y la PUCP. (Foto: Archivo personal)

Sobre los desafíos que ha tenido que afrontar como investigadora, Lisette explica que, por años, la academia ha sido un espacio bastante masculinizado y patriarcal, y si bien eso ha ido cambiando con los años, aún se mantienen presentes algunas de estas dinámicas entre las y los investigadores. “Creo que muchas mujeres tenemos internalizado este mandato de la sobreexigencia y sentir cierta inseguridad a la hora de hacer investigación. Por ello, se despliega esta cuestión de sobreexigirse y sobreproducir para reclamar este espacio”, agrega.

 

Paula Varas: “El principal desafío como investigadora fue enfrentarme a prejuicios y estereotipos por mi género, pero también por mi edad”.

Con un Bachiller en Ciencia Política y Gobierno en la PUCP, y un magíster en Políticas Públicas, Derechos Humanos y Sostenibilidad obtenido en la Universitat de Barcelona, Paula ha forjado su camino en la investigación comparada, tanto cualitativa como cuantitativa, con un enfoque especial en temas de salud y migración. Además, su experiencia no se ha limitado al ámbito académico, ya que también ha incursionado en el diseño, implementación y ejecución de proyectos y consultorías para el sector el minero, la industria y la infraestructura.

Pese a su trayectoria destacada, Paula ha tenido que enfrentarse a distintos retos a lo largo de su carrera. “El principal desafío como investigadora fue enfrentarme a prejuicios y estereotipos por mi género, pero también por mi edad”, indica.  Si bien estas adversidades la han fortalecido y le han proporcionado una base sólida para abordar futuros proyectos con confianza y determinación, Paula enfatiza la persistente necesidad de desafiar las estructuras patriarcales arraigadas aún en el ámbito académico.

Durante su paso por Pulso PUCP, Paula colaboró estrechamente con el Dr. Juan Arroyo, ex viceministro de Salud Pública e investigador de Pulso PUCP, sumergiéndose en la investigación sobre políticas de salud y migración. Este trabajo no solo le permitió adentrarse en los desafíos y complejidades que rodean estos temas, sino también desarrollar una habilidad única para cuestionar suposiciones arraigadas y examinar perspectivas preexistentes con una mirada crítica y reflexiva.  

Paula se involucró en la investigación sobre políticas de salud y migración en Pulso PUCP. (Foto Archivo Personal)

A partir de su experiencia, Paula destaca la importancia de investigar en salud y migración para entender las intersecciones con el género y mejorar las condiciones de vida de las mujeres migrantes a través de políticas y programas basados en evidencia. “Al abordar barreras como el acceso limitado a servicios de salud y la discriminación, estas investigaciones catalizan intervenciones que fortalecen las redes de apoyo comunitario y mejoran el acceso a la atención en salud”, agrega.

Maria Pia Van Oordt: “Es importante incluir la perspectiva de las mujeres en la investigación para asegurar una visión holística e integral de los problemas”

Maria Pia se ha formado en las aulas de la Facultad de Ciencias Sociales de la PUCP, en la carrera de Ciencia Política y Gobierno. Desde pequeña tuvo un interés particular en entender las distintas realidades sociales que albergaba el país y generar un impacto positivo en la calidad de vida de las diversas poblaciones. Esta motivación la llevó a optar por la especialidad de Gestión Pública y Políticas Públicas. “Desde la gestión pública, las políticas públicas y la investigación se puede generar mucho conocimiento sobre cómo ayudar a las distintas poblaciones del país y cómo gestionar recursos para que estos realmente ayuden a mejorar la calidad de vida de más ciudadanos”, comenta.

Además de la ciencia política, Maria Pia se desempeña como deportista profesional en la modalidad de vela 49erFx, y ha llegado a participar en los Juegos Olímpicos de Tokio 2021. Actualmente, es miembro del área de análisis de datos y gestión de la información en Pulso PUCP. De su experiencia trabajando en el instituto destaca el haber colaborado con distintos investigadores y grupos de investigación, así como conocer distintas metodologías, acceder a diversos tipos de data y trabajar directamente con el Estado en variedad de proyectos. ”Esto me ha ayudado a terminar de formarme como profesional adquiriendo herramientas que me van a ayudar muchísimo a poder realizar mis propias investigaciones y también para aportar en cualquier investigación en la que yo esté involucrada”, señala.

Maria Pia formó parte de la 14° edición del programa de fortalecimiento de la función pública para América Latina de la Fundación Botín. (Foto: Archivo Personal)

Una de las dificultades que Maria Pia ha tenido que afrontar en el ámbito de la investigación es la escasez de datos y la falta de recopilación de información a nivel distrital, provincial, regional y nacional en el país. “En este sentido, los investigadores no tienen tantas herramientas para llevar a cabo investigaciones novedosas que den conocimiento para la toma de decisión porque muchas veces no hay información”, recalca. Según la joven investigadora, la falta de datos también implica que los investigadores se vean obligados a realizar ellos mismos la recopilación de información, lo que consume tiempo y recursos, desincentivando la participación de más personas en la investigación.

Asimismo, destaca que la escasez de representación femenina en los espacios académicos orientados a la investigación cuantitativa es otro reto dentro de su formación como investigadora. “No hay tantas mujeres como hombres y creo que es importante incluir la perspectiva de las mujeres en la investigación para asegurar que realmente se tenga una visión holística e integral de los problemas incluyendo a todas las partes de la población”, recalca.