En el Perú, el pan es un alimento básico en la dieta básica diaria de la población. Desde tiempos prehispánicos, ha formado parte de la cultura culinaria del país, y hoy en día se pueden encontrar una gran variedad de tipos de pan en todo el territorio nacional.
El pan es una fuente importante de carbohidratos, proteínas, minerales y vitaminas del grupo B, lo que lo convierte en un alimento nutritivo y energético para el organismo (INS, 2013). Además, el pan también es muy versátil, y puede ser consumido solo o acompañado de una gran variedad de alimentos, tanto dulces como salados.
En este informe se analizará el consumo de pan en el Perú, con un enfoque en las diferencias regionales, el consumo por tipo de pan y los puntos de venta más utilizados por los consumidores. El objetivo es proporcionar una visión general del papel del pan en la dieta de los peruanos.
En la costa urbana, la región con el mayor consumo de pan en el país, el consumo ha disminuido gradualmente desde el 2009 hasta el 2021, ya que en el 2009 el consumo de pan era de 25.8 kg per cápita mientras que en el 2021 el consumo fue de 21.4 kg per cápita. Mientras tanto, en la costa rural el consumo también disminuyó, pero en menor medida, pasando de 20,15 kg per cápita en 2009 a 17,53 kg per cápita en 2021.
En cuanto a la sierra urbana, el consumo de pan en los últimos 12 años ha sido relativamente constante oscilando entre 24.1 y 25.21 kg per cápita pero en el 2021 experimentó una disminución considerable, llegando a 21.9 kg per cápita. Por otro lado, en la sierra rural, el consumo de pan aumentó gradualmente desde 2009 hasta 2019, pasando de 9.09 a 13.18 kg per cápita respectivamente, pero en los dos últimos años ha sufrido una leve disminución, llegando a 12.22 kg per cápita en el 2021.
En la selva urbana, el consumo de pan ha disminuido gradualmente desde 2009 hasta 2017, pasando de 18.72 a 15.59 kg per cápita respectivamente, pero en el 2018 tuvo un incremento a 16.25 kg per cápita y se ha mantenido constante en los últimos años. En cambio, en la selva rural, el consumo de pan ha ido en aumento pasando de 9.35 kg per cápita en el 2009 a 11.22 kg per cápita en el 2021, siendo esta la región con menor consumo de pan per cápita en comparación con las demás regiones.
En Lima Metropolitana y Callao, el consumo de pan se ha mantenido constante desde 2009 hasta 2019, oscilando entre 20.5 y 24.51 kg per cápita, pero en los últimos años ha sufrido una leve disminución, llegando a 19.73 kg per cápita en el 2021.
Comparando los datos de consumo de pan entre las diferentes regiones, se observa que la costa urbana y la sierra urbana son las regiones con el mayor consumo de pan, seguidas por la costa rural y la selva urbana, mientras que la sierra rural y la selva rural tienen las tasas más bajas de consumo de pan en el país.
Las razones que explican las diferencias en el consumo de pan por región pueden ser diversas. En el caso de la costa urbana y sierra urbana la facilidad y mayor acceso a panaderías y supermercados puede influir en un mayor consumo de pan a comparación de otras regiones. En la sierra rural y selva rural, el acceso limitado a panaderías y supermercados puede explicar el bajo consumo de pan, debido a la falta de oferta o acceso a pan fresco.
El pan corriente o común es el tipo de pan más consumido en el país, especialmente en las regiones de la selva rural y urbana, donde representa más del 69% del total de pan consumido. En otras regiones el consumo oscila entre el 46.5% y 63.2%, mientras que en Lima metropolitana y Callao solo representa el 0.89%.
En segundo lugar, se encuentra el pan francés, el cual es el más consumido en Lima Metropolitana y Callao, con un valor de 57.9% del total, pero en las demás regiones su consumo no supera el 30%, siendo la región de la sierra rural la que menos consume este tipo de pan con un valor de 7.9%.
Otros tipos de panes, como los regionales o artesanales, representan aproximadamente el 19% del total en todas las regiones del país. El pan integral y pan de yema, tienen un bajo nivel de consumo en las regiones, oscilando entre el 0.2% y el 3% del consumo total, solo en Lima Metropolitana y Callao el valor aumenta de manera significativa, el pan integral representa el 7.4% mientras que el pan de yema representa el 6.6% del total.
En cuanto al pan de molde envasado y el pan tolete, su consumo es mínimo en comparación a los demás tipos de pan, sin superar el 1% en todas las regiones del país. El pan chapla solo tiene un consumo significativo en las regiones de la sierra urbana y rural, alcanzando el valor de 6.56% y 7.14% respectivamente, mientras que en las demás regiones no supera el 1.5%.
La diferencia en el consumo de pan en las diferentes regiones puede explicarse por diversos factores, cómo las preferencias culturales, los hábitos alimenticios y la accesibilidad a diferentes tipos de pan. El pan corriente o común, es un tipo de pan económico, fácil de preparar y más accesible en comparación a otros tipos de pan, lo cual explicaría el por que de su mayor consumo en las diferentes regiones del país.
En el Perú, existen diversos lugares donde se puede comprar pan, como los ambulantes que recorren la calles vendiendo pan, las ferias temporales, los mercados permanentes donde se pueden comprar productos al por menor y al por mayor, las bodegas que se encuentran dispersas en las ciudades, las tradicionales panaderías e incluso los modernos supermercados.
En la costa urbana, los consumidores prefieren comprar pan a los ambulantes, ya que representan el 49,1% de los puntos de venta de la región, seguido de las panaderías que representan el 45,1%. En la costa rural, los ambulantes representan el 61,9% de los puntos de venta, seguidos de las bodegas con un 24% y las panaderías con un 11%.
En Lima Metropolitana y Callao, las panaderías son el principal punto de venta de pan ya que representan el 65.2%, seguidas de las bodegas al por menor con un valor del 18.7%.
En la sierra urbana, las bodegas al por menor son el principal punto de venta de pan utilizado por los consumidores, con un valor del 90.8%, los ambulantes solo representan el 5% mientras que los demás puntos de ventas no superan el 1.5%. En la sierra rural las bodegas al por menor solo representan el 55% de los puntos de venta, mientras que los ambulantes, las ferias y las panaderías representan aproximadamente el 35% de los puntos de venta de pan.
En la selva, tanto en la urbana como en la rural, los puntos de venta más utilizados por los consumidores son las bodegas al por menor, las panaderías y los ambulantes. En la selva urbana, las bodegas al por menor representan el 71%, mientras que en la selva rural, representan el 69,7%. Las panaderías representan el 19,6% y el 15% respectivamente. Por otro lado, los ambulantes representan el 6,2% en la selva urbana y el 11,3% en la selva rural.
Se puede observar que los puntos de venta de pan utilizados por los consumidores de pan varían considerablemente entre las diferentes regiones del país. En la costa urbana y rural, los ambulantes son el principal punto de venta, mientras que en la sierra urbana, sierra rural, selva urbana y selva rural las bodegas al por menor representan los mayores puntos de venta. En Lima Metropolitana y Callao, las panaderías son el principal punto de venta de pan.
Referencias:
Centro Nacional de Alimentación y Nutrición (2013). Tablas peruanas de composición de alimentos.
https://bvs.ins.gob.pe/insprint/CENAN/Tablas_peruanas_composici%C3%B3n_alimentos_2013.pdf
Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI) (2021). Encuesta Nacional de Hogares - ENAHO 2021
https://proyectos.inei.gob.pe/microdatos/
